Un intento, quiero dos
23.1.10 | Author: Mukis
"Tu eres el clamor repetitivo y doloroso que se adentra en mí y que se silenciaria si yo pulsara el botón off, pero no puedo."
Corre, tú
19.1.10 | Author: Mukis
Corrió. Corrió tanto que no tocaba el suelo, que las piernas se enfrentaban en un intento violento por intentar adelantarse, pero no podían. Empezó a sentir un tremendo dolor como si alguien hubiera prendido con una cerilla cada una de sus piernas y el fuego saboreara cada célula, cada rincón.
No vislumbraba ningún fin en el camino, el principio había quedado ya tan lejos, tan pálido, tan marchito y desenfocado que solo el girar la cabeza hacia atrás le impulsaba para seguir corriendo, era la pequeña motivación que medraba con el paso de las horas, los minutos, los segundos... Y que estaba poco a poco, sin quererlo, acabando con él.
Se sentía perseguido y al mismo tiempo persiguiendo, no sabía por quien ni a quien, pero le daba igual, nunca sería alcanzado por nadie y él ya habría alcanzado a todos.
El dolor se disipaba por momentos, el cansancio era inmenso, no comía ni bebía y el sudor resbalaba por su piel formando ríos que no desembocaban en ningún mar.

Oscureció. Oscureció y de repente como un guiño de Dios, se encendió una luz en el final. Corrió, corrió y corrió, rompiendo todas las reglas, haciendo crujir el suelo, rompiendo las ráfagas de viento, enloquecidamente. Fue la primera vez en toda su vida que sonrió. Alguien le estaba llamando, alguien quería que dejara de sufrir, alguien quería abrirle nuevas puertas, puertas que guardaban felicidad. Pensó.
Llego con los pies sin suela, con los los dedos agrietados envueltos en dolor, con el semblante deteriorado y cansado, por el que cualquiera diría que habían pasado años y quizás siglos.
A alguien, no se sabe a quien, le habló.
-Vengo desde muy lejos, para quedarme. No necesito regresar. Me he perdido.
Rotos y tal
13.12.09 | Author: Mukis
Hace meses que lo bonito se ha extinguido en un triste fin, los susurros yacen en el silencio y las palabras de amor quedan ya tan lejos, tan marchitadas y tan débiles que con solo pronunciarlas se rompen y aprendes a olvidarlas. Cuantas promesas se ahogaron en las lágrimas que derramamos juntos, oí portazos día tras día y el último me destrozó, sonó tan fuerte, seco y áspero que me desgarro por dentro, en ese momento morí y no volví a nacer.

Siento aún la llama quemándome en mi interior, y no hay nada que me calme, no hay nada que la apague y que traiga consigo la paz que necesito. Ya no queda nada de los sueños, las caricias, los besos, los abrazos, las sonrisas, las esperanzas y las miradas. "No fuiste tu y tampoco fui yo" fue la última frase, fue otra manera más de decir adiós, un pequeño rasguño que desencadeno un desastre silencioso, invisible y destructor.
Para los que esperan
27.11.09 | Author: Mukis
Cuando un haz de luz te alumbre en la oscuridad. Cuando los pocos sean muchos. Cuando te agarren y no te suelten nunca más. Cuando mires y te devuelvan la mirada. Cuando abrás más que cierras. Cuando el negro pase a gris. Cuando la lluvia se abstenga de seguir. Cuando el "no" sea un "igual".

Podremos decir que hay esperanza.
By Anders Bäckman
19.11.09 | Author: Mukis




Love, love.